Luego de 40 años, estudiantes, maestros y profesores, organizaciones
sociales, sindicales y políticas movilizaron al Ministerio de Obras
Públicas bonaerense reclamando justicia y recordando a los estudiantes
secuestrados, torturados y desaparecidos por la policía la noche del 16
de septiembre de 1976. Este hecho que sucedió en la ciudad de La Plata
es recordado como la “Noche de los Lápices”, uno de los acontecimientos
más aberrantes producido por la última dictadura cívico-militar.
“La Noche de los Lápices” sintetiza un momento de la represión vivida
en los años de dictadura, donde desaparecieron a unos trescientos
jóvenes entre 13 y 18 años, la mayoría estudiantes. Este hecho histórico
se ubica en el marco del plan sistemático de exterminio que llevó
adelante la última dictadura, y se concretó a partir de una serie de
secuestros realizados durante el mes de septiembre de 1976, que tuvieron
como blanco a estudiantes secundarios de la ciudad con militancia
política y estudiantil. La noche del 16 de septiembre de 1976 se inició
un operativo conjunto de efectivos policiales y del Batallón 601 de
Ejército para capturar a nueve jóvenes que tenían entre 16 y 18 años, y
en su mayoría eran integrantes de la Unión de Estudiantes Secundarios
(UES), quienes entre otros reclamos, pedían la gratuidad del boleto de
transporte.
En ese marco la movilización contó con la participación de la CTA
Autónoma de la provincia de Buenos Aires, como es en cada aniversario de
la “Noche de los Lápices”, su secretario General Oscar de Isasi afirmó
que “es muy importante volver a estar en la marcha, como lo han
hecho nuestras organizaciones todos estos años, tanto ATE como la CTA
Autónoma. Tiene que estar vigente la memoria de aquellos compañeros y
compañeras que dieron lo mejor que tenían, la vida, por un proyecto
donde pudiéramos ser felices la mayoría de los argentinos y que contenía
sin ningún lugar a dudas la pelea específica del boleto estudiantil”.
Fue recién en el año 2015 que la legislatura provincial, luego de
casi 40 años de reclamos y movilizaciones, aprobó la Ley 14.735 de
Boleto Especial Educativo. Aunque hoy su implementación es parcial y
sigue sin ser una ley que incluya a todo el sistema educativo
estudiantes, maestros, profesores, auxiliares, este se trata de un
verdadero hito, ya que establece por ley la gratuidad del boleto para
estudiantes de todos los niveles del sistema educativo. Es, asimismo,
una reivindicación histórica con aquellos jóvenes que lucharon y dieron
su vida por una sociedad más justa e igualitaria.
“Poder hacerlo en el marco del triunfo, aunque sea en términos
relativos, de la lucha por ese boleto nos permite hacer un recorrido que
nos provoca cierto placer. Poder haber sostenido la memoria de esos
compañeros y compañeras y poder ofrendarle a ellos el triunfo parcial de
la implementación del boleto educativo, y el compromiso de seguir
luchando para que se implemente definitivamente para todos los
estudiantes, trabajadores y toda la comunidad educativa, hace que esta
movilización tenga un sabor especial” agregó.
Por último de Isasi remarcó que “la lucha, incluso de los que ya
no están tiene resultados. Porque esta lucha que iniciaron los
compañeros que hoy no están la siguieron otros compañeros y hoy, aunque
parcial, tenemos su resultado. Lo que sirve para seguir trabajando y
construir mas fuerza organizada para que algún día en este país sea
natural y normal que la inmensa mayoría de la población pueda vivir
feliz”.
También participó de la histórica movilización quien fuera estudiante
en el momento que sucedió este nefasto hecho, y quien además fue
detenido ilegalmente durante la última dictadura cívico-militar Hugo
Cachorro Godoy, hoy secretario General de la Asociación Trabajadores del
Estado (ATE).
Contextualizando Godoy relató algunos recuerdos de aquella época: “El
75 fue un año muy intenso, como la vida del país en ese entonces, y se
dio un proceso de organización de los centros de estudiantes
aceleradísima, crecían como hongos, no eramos los únicos que
organizábamos, había otras orgas de distintos signos que peleaban por lo
mismo. Se dio un proceso muy rico. El logro principal fue el haber
organizado centros de estudiantes en todas las escuelas de la ciudad de
la plata, fue impresionante. Fue un año de mucho desarrollo de
organización en ese plano y en lo sindical también, el proceso que se
dio de organización de las escuelas secundarias era paralelo al
desarrollo del conflicto sindical y otros conflictos que se daban en el
país que tenían la violencia armada”.
Ya en 1976 Godoy recordó que “Junio fue un mes que en La Plata
hubo movilizaciones de 10 mil a 12 mil personas, todos marchando juntos
desde propulsora, astilleros, y que termina culminando a nivel nacional
en el Rodrigazo. El que se pone al frente de ese fenómeno en términos
políticos y queda como figura de poder en el gobierno de Isabel es
Lorenzo Miguel desplazando a Lopez Rega. Se reabrieron los convenios
colectivos y se llegaron a aumentos del %80, fue un proceso riquísimo de
conflicto. En ese marco iba creciendo el conflicto y la organización. Y
la lucha se fue centrando en el Boleto Escolar, convirtiéndose en
un objetivo central del movimiento estudiantil como lucha
reivindicativa. Eso se disparó, explotó entre Agosto y Septiembre, pero
yo ya no estaba, caí preso el 6 de Agosto. Me sacaron de actividad y
toda esa cosecha de lo trabajado durante el año me lo
perdí personalmente pero sucedió. Fue un hecho colectivo impresionante,
La Plata se inundó de movilizaciones estudiantiles y el símbolo era
Obras Públicas porque el reclamo estaba dirigido ahí, las movilizaciones
confluían en ese edificio”.
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